jueves, 24 de mayo de 2012

INFIERNO DE DANTE : VESTIBULO

De acuerdo a la Divina Comedia, las almas de los pecadores caen directamente a este vestíbulo; están desnudas, cansadas y bastante molestas. El ambiente que los recibe no es precisamente acogedor: apesta, se oyen llantos, aullidos y maldiciones por todas partes y esta repleto de muchas otras personas de todos los lugares de mundo que también están de pésimo humor.
En este ambiente es fácil asumir que quienquiera que llegue, por más valiente quese haya considerado en vida ha de sentir por lo menos horror al verse en esa circunstancia, aparte de la confusión por sobre donde se esta. Sin importar que tan segura podria haber estado una persona respecto a la existencia del infierno, la sensación experimentada por las almas de los recien llegados no debe tener punto alguno de comparación con lo que se podría experimentar al caer de verdad (si es que fuera verdad, por supuesto...)
Pero el vestíbulo no es solo un lugar de paso. Para algunos es también el lugar en donde deben pasar el resto de la eternidad. De acuerdo a la Divina Comedia, en el vestíbulo se hallan todos aquellos (humanos y ángeles) que nunca se decidieron por el bien o por el mal mientras vivieron (en el caso de los ángeles, cuando Lucifer inició su revuelta) así que como obviamente no pueden ir al cielo (y por ende no pasan por el purgatorio como la mayoría de  los mortales) y el infierno se niega a aceptarlos entre sus condenados (ya que el hecho de no haber hecho nada malo que los condujera al verdadero infierno podría provocar cierto malsano placer en los verdaderos condenados, quienes sí eligieron el mal y por lo tanto llevan bien merecida su estancia allí; y para los condenados todo placer, por mas pequeño que sea, debe serles negado).
Su castigo es deambular eternamente en persecución de un estandarte que los lleva de un lado a otro sin destino fijo (puesto que nose decidieron a seguir a nadie, ahora corren tras una ilusión vacía que no los conduce a ninguna parte). Sufrimiento adicional se lo causan ellos mismos, por la envidia que los corroe con respecto a los verdaderos condenados: ellos que se dirigen hacia los círculos inferiores a sufrir por toda la eternidad son en su opinión más afortunados, puesto que al menos experimentaran tormento por lo que hicieron y no por lo que dejaron de hacer. Para rematar su miserable condición Dante coloca insectos para atormentatarlos ad eternum; mosquitos y avispas que los piquen y molesten y gusanos asquerosos y repugnantes que recojan sus lagrimas mezcladas con la sangre de sus picaduras: repugnante, si bien no demasiado atormentador, nada a lo que un humano no podría acostumbrarse con el tiempo. Como dije, su tormento principal es el no ir a ninguna parte y el saber que es causado por lo que no hicieron, en lugar de por algo que podrían haber hecho.
Aquí algunas representaciones del tormento de los mediocres:



 Luego de ver a los habitantess permanentes del infierno Dante continua su viaje hacia el verdadero infierno, hasta llegar a las orillas de un río. Los ríos o lagunas infernales son importantes por cuanto permiten a su vez castigar a un determinado grupo de pecadores. El primer río, lllamado Aqueronte es la razón por la que ningún mediocre podría jamás llegar a conocer el verdadero infierno. Dante no lo menciona pero se asume que ha de ser caudaloso, profundo y bastante ancho; imposible de cruzar a nado.
El guardián de este río, conductor de la única balsa que atraviesa el río llevando a los condenados hacia la otra orilla es Caronte, personaje de la mitología griega, que Dante usa indiscriminadamente a pesar de el alto contenido religioso que implica el libro (al final bueno es solo un poema con el que el autor divirtió el ingenio, pero bueno en esa épocapodría haber despertado bastantes críticas). Caronte es retratado como un demonio malhumarado por decir menos. Insulta a sus futuros pasajeros cuando llega a recogerlos y los golpea con el remo si se retrasan durante el embarque.
El trayecto hacia la otra orilla es mas bien desconocido, por cuanto Dante se desmaya (no da luces de ser muy valiente el muchacho) y despierta al otro lado. Para los entendidos, la balsa de Caronte está reservada para los pecadores y Dante al ser cuasi-santo no puede subir por lo que es mágicamente trasportado a la otra orilla y para ello se requiere que se desmayen. Queda a merced de la imaginación el hecho de si existen o no personas experimentando tormento dentro de este río, si sus aguas son calientes que hierven o frías que cortan. Para algunos aritstas, el Aqueronte contiene algunos pecadores y hay quienes se atreven a decir que son los mediocres que intentan cruzar el lago a toda costa; y que, al no conocer la ruta y no poder nadar en estas aguas heladas y pesadas, quedan para siempre allí, atacando la balsa cada vez que se las cruza e intentando compartir su destino eterno con cualquiera de sus pasajeros. Pero claro, todo esto es pura especulación porque la Comedia calla al respecto...







Esta es una toma de la pelicula  muda Dante's Inferno de 1911. Lógicamente los actores no podían estar desnudos totalmente , pero la escena es bastante gráfica y si bien no parecen estar experimentando terrible sufreimiento como se supone que experimentan al menor es una buena representación de la situación.

Esta última imagen nos muestra este cruce del Aqueronte en el que las almas de los condenados no solo estan cruzando el río dentro del bote sino también dentro del río experimentando algún tipo de tormento no mencionado en la comedia
 






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